Noche de Muerte y Misterio...

Era un día como hoy, pero de noche.



Stephan me invitó a cenar, pidiéndome que para la ocasión vistiera mi tapado de cuero negro. Con sombrero y guantes haciendo juego.







Estaba nervioso por llegar a tiempo, pero no soltaba prenda. El restaurante en cuestión era una "sorpresa", ya me enteraría cuando llegáramos...



A los pocos minutos descubriría que se trataba del famoso Yamashiro, ubicado en las colinas de Hollywood, con una vista impresionante de la ciudad y un menú que deja bastante que desear a juzgar por el precio. De todas formas, ¿Quién va al Yamashiro por la comida?



Por eso me sorprendió, que en lugar de darnos una mesa junto a la ventana, nos conducieran a un patio interior donde ya esperaban otros 40 ó 50 extraños. La gente hablaba, unos con otros, y algunos me miraban de reojo. Me estaba por poner incómoda cuando Stephan me dijo al oído "prestá mucha atención a lo que pasa a tu alrededor y si alguien te pregunta algo, mentí". ¿Mentí???? ¿Se volvió loco? ¿De qué habla?



Una pareja se acercó y Stephan se presentó como Phillip Marlowe. Me descubrí diciendo "Penélope. Mi nombre es Penélope Bagley (y bueno, soy adicta a las galletitas...) Soy periodista... de un diario francés. En lugar de largar la carcajada, levantaron la ceja derecha y al unísono largaron "Ah! Qué bien!".



Entonces entró el mayordomo a avisarnos que "la cena está servi..." y se escuchó el tiro y los gritos y un hombre de camisa blanca se desplomó en el piso y la sangre le empezó a chorrear por el costado... Y otro saltó mostrando su identificación, diciendo que no nos austáramos, que "aquí no pasó nada", y dirijiéndose al mayordomo "por favor llévelos al comedor".



Nos llevaron a una habitación donde además de las mesas preparadas para la cena, había otra a un costado, con algunas cosas que según el detective "han sido confiscadas como pruebas del delito. Siéntanse libres de revisarlas para sacar sus propias conclusiones"



De ahí en más, los sucesos se precipitaron. Algunos comensales empezaban, a los gritos, a reprocharse cosas adelante de todos, otros se levantaban para ir al baño y no regresaban. Una mujer cayó envenenada y nos pidieron que por favor no bebiéramos el agua que estaba en la jarra, por las dudas...



Así siguió la velada. Ya se habrán dado cuenta que entre las 50 personas, habían mezclados unos 10 actores. Stephan me había invitado a una obra de teatro interactiva, como regalo de cumpleaños!



El haberme presentado como periodista, me permitió sentirme libre de hacer preguntas idiotas a todo el mundo y divertirme.



A los postres, nos repartieron unos papelitos donde debíamos poner el nombre del asesino. La persona que acertara se haría acreedora a una réplica del Halcón Maltés.







Ganó un muchacho muy perspicaz, de la otra punta de la mesa. La culpable terminó siendo la "envenenada".



La mayoría, en cambio, pensó que el asesino era "Penélope Bagley". Una actriz con un terrible acento francés...




POR FAVOR NO SE PIERDAN LA FIESTA QUE ORGANIZARON LOS AMIGOS EN EL REFUGIO!!!!

No tengo palabras para expresar lo emocionada que estoy. Y el orgullo de sentir que los mejores amigos del mundo, me tocaron a mí. Hoy me sorprendieron de verdad con la mejor fiesta de cumpleaños! Gracias, gracias y mil gracias.



(y sí... Hoy cumplo 24 años... otra vez. Los invito a probar la torta. Hay para todos los gustos!!!)